Estos 10 sencillos consejos ayudan a su cuidado:
Disfrutar de un pelo bonito requiere cuidarlo diariamente aplicando productos adecuados para cada tipo. Así mismo debemos cuidar lo que comemos para mantenerlo saludable. Las dietas milagro y los cambios bruscos de peso afectan. Es imprescindible no suprimir el consumo de proteínas (presente en huevos, leche, queso, pescado y carne) y potenciar el de ácido linoléico, vitaminas del grupo B, magnesio y zinc, así mismo tener en cuenta el consumo de proteínas vegetables (presentes en las legumbres) y de frutos rojos, poseedores de altos niveles de antioxidantes.
- Agua fría: Esta hace que luzca con más brillo. Se puede comenzar con agua tibia y el último enjuagado hacerlo con agua a más baja temperatura. Lo que realmente lo limpia es el champú. La función de los dedos es únicamente la de repartir el champú en todo el cuero cabelludo.
- Desenredar: El mejor momento para desenredarlo es justo al salir de la ducha, ya que en esos instantes está mucho más flexible al estar húmedo. Si esperamos a que se seque podemos dañarlo. El cepillado exfolia el cuero cabelludo, elimina restos de productos, estimula la circulación sanguínea, favorece su crecimiento y potencia su brillo.
- No acostarse ni cogerlo mojado: Si esto se hace se puede llegar a dañar la cutícula del cuero cabelludo. Cuando el cabello está húmedo se encuentra en su estado de mayor debilidad y con mayor tendencia a sufrir roturas.
- Cortar el pelo a menudo: Para que crezca de manera más rápida, es necesario hacerlo cada dos meses. Los que se caen al ser lavados son “viejos” que se pierden ante cualquier traumatismo que un pelo sano resiste. Cada día se suelen desprender una media de 50 que después vuelven a nacer en el mismo sitio, por lo cual el número total siempre permanecerá constante. El pelo no se cae más por lavarlo a diario.
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